Un editor no puede ganar dinero con publicidad vinculada a contenido referente a la prostitución o a la pedofilia. En cambio, sí sobre apuestas online, marihuana o pistolas, aunque en este caso tendrá restringidos los ingresos. Son algunos ejemplos de todo el contenido que Google Adsense prohíbe monetizar con publicidad.

El pasado mes de agosto, Google ya lo anunció: no cambiaba en exceso su política de publicidad, pero sí la simplificaba para dejar los términos más claros para editores y anunciantes.
Su objetivo era hacer regresar a las grandes marcas que ya habían abandonado Google o YouTube, tras confirmar que sus anuncios se despachaban en textos o vídeos que iban en contra de su reputación.
El buscador también quiso así tranquilizar a otros anunciantes, que estaban a punto de la espantada.
Por ejemplo, una gran multinacional de comida rápida no podía aceptar que sus spots se incrustaran en vídeos de abusos sexuales a menores.
Google AdSense cita ejemplos de cuál serán ahora sus vetos
El comunicado de agosto de Google emplazaba a los editores a 30 de septiembre. Era ésta la fecha límite de entrada en vigor, no de una nueva política de AdSense, pero sí de una letra pequeña actualizada y más simple de entender.
De hecho, Google se ha preocupado de enviar varios correos electrónicos a los administradores de las cuentas de AdSense para recordarles lo anunciado.
Y lo anunciado es, básicamente, la activación de dos límites para los editores que trabajan con Google AdSense, AdMob y Ad Manager.
La novedad, en este aspecto, es que las reglas sobre contenido ahora se dividen en las siguientes dos categorías.
Así son las políticas y restricciones de AdSense
Primero. AdSense incluye las denominadas Políticas para editores, donde se describe qué tipo de contenido no se puede monetizar con publicidad bajo ningún concepto.
La segunda categoría se llama Restricciones para editores, unas limitaciones más laxas en las que también se definen los contenidos que, sin violar lo anterior, no son idóneos para todos los anunciantes.
Básicamente, la actualización trae dos listados, uno de prohibiciones que conllevan suspensión o cancelación de la cuenta de AdSense y otro de restricciones con penalización (no violan las normas, pero reportan menos ingresos), respectivamente.
Así, todo pivota en torno a qué contenido no se puede monetizar y cuál tendrá ingresos limitadísimos, dado que ahí mucha publicidad no querrá estar presente.
Dos alertas a vigilar en el panel de Google AdSense
Ambas categorías son importantes para los editores de AdSense, porque, en el panel de administración, les aparecerá dos nuevas columnas con sendas alertas.
La primera se llama “Debe solucionarse” y le indica que debe solventar una infracción de contenido que atenta contra las políticas antes mencionadas.
La segunda columna o “Estado de servicio de anuncios” le avisa, en cambio, de que Google ha suspendido la monetización o bien se ha restringido el número de anunciantes.
El contenido que Google prohíbe monetizar con anuncios
Las Políticas de editores de Google son un decálogo de contenidos vetados en su ecosistema publicitario. Quien intente monetizarlos verá bloqueados los anuncios o cancelada su cuenta de AdSense.
De hecho, Google ya comunicó que había eliminado 734.000 cuentas y los anuncios de casi 28 millones de páginas que infringieron dichas políticas en 2018.
Ejemplos concretos de contenido no permitido por AdSense
Así, al contenido que Google prohíbe monetizar con publicidad de una manera más detallada dentro de sus productos y servicios le añade algunos ejemplos dentro de su afán por simplificar sus normas publicitarias.
1.- Contenido ilegal o que atente contra el copyright: contenido pirata, falsificaciones o imitaciones.
2.- Pedofilia y abuso sexual de menores: contenido de abuso sexual infantil o de atracción sexual hacia menores.
3.- Contenido sexual explícito: textos, fotos, audio y vídeo de sexo explícito (oral, anal, masturbación), pornografía en dibujos animados; actos sexuales no consentidos (violación, zoofilia, necrofilia o pornografía con lolitas); prostitución, servicios de acompañantes o masajes íntimos.
4.- Contenido para adultos en aquel para todos los públicos: sexo o violencia en personajes infantiles.
5.- Productos de animales amenazados o en peligro de extinción: venta de tigres, cuernos de rinoceronte, aceite de delfín.
6.- Contenido peligroso o despectivo: mensajes de odio por raza, religión, nacionalidad; acoso, suicidio, anorexia; terrorismo o porno venganza.
7.- Comportamientos deshonestos: falsificar pasaportes o diplomas, venta de exámenes o trabajos académicos o información para superar controles de drogas.
8.- Contenido falso: programas que ofrecen ganar mucho dinero o suplantación de identidad para lograr datos de usuarios.
9.- Software malicioso o no deseado: virus, troyanos o software espía.
10.- Matrimonios de conveniencia: servicios matrimoniales a la carta con personas extranjeras o viajes para encontrar pareja.
Google prohíbe la prostitución, pero no las apuestas online
Con estas prohibiciones más explícitas, Google quiere impedir monetizar este contenido y el editor que lo intente verá cómo le suspenden o cancelan la cuenta de AdSense.
Sin embargo, dentro de su actualización también incorpora la mencionada categoría de Restricciones de editores, donde su veto es más permisivo.
Google fija ahí otros límites, pero no prohíbe. Es más laxo puesto que no cancela o bloquea anuncios, sino que solo reduce el volumen de ingresos de los editores.
Ejemplos de restricciones que aplica Google AdSense
De hecho, AdSense informó que o bien disminuye el inventario de anuncios, o bien puede que no haya ninguna fuente apta para servir publicidad o incluso difunde anuncios vacíos sobre el contenido.
En resumen, las Restricciones de editores abarcan más de una decena de tipos de contenido sensible, que va desde sexo, violencia, explosivos, pistolas, tabaco y alcohol, drogas recreativas o apuestas online.
Contenido que AdSense permite, pero penaliza en ingresos
1.- Contenido sexual: desnudos, voyerismo, juegos de rol, festivales de cine porno, juguetes y consejos sexuales, pastillas para la líbido.
2.- Contenido desagradable: fotos de sangre, tripas, escenas de crímenes o accidentes, tiroteos o vídeos de ejecuciones.
3.- Explosivos: bombas de clavos, químicas, petardos o fuegos artificiales, o guías para fabricarlos o imprimirlos en 3D)
4.- Pistolas o productos relacionados: pistolas, rifles, armas de caza, de paintball, aire comprimido, munición, mirillas, culatas o instrucciones de montaje.
5.- Otras armas: estrellas ninja, puños americanos, espray pimienta, navajas automáticas, hachas.
6.- Tabaco: cigarrillos, puros, tabaco de mascar y cigarrillos electrónicos, papel de fumar, pipas)
7.- Drogas recreativas: cocaína, heroína, marihuana, cachimbas, coffee shops, consejos para consumirlas.
8.- Venta o uso inadecuado de alcohol: representación positiva del consumo o competiciones.
9.- Juegos de apuestas online: casinos online, décimos de lotería, tarjetas para rascar, apuestas deportivas.
10.- Medicamentos con receta: venta de dichos medicamentos o farmacias online.
11.- Productos de farmacia y suplementos no aprobados: suplementos de herbolario, con principios activos peligrosos o engañosos.
Las restricciones pueden chocar con la línea editorial
Este tipo de temas no solo es sensible para usuarios y anunciantes, sino que también lo son para los editores que crean contenido, porque, en muchos casos, el interés publicitario puede chocar con el interés informativo.
“Con ‘contenido’ nos referimos a todo aquello que aparezca en su sitio web o aplicación, lo que incluye otros anuncios y enlaces a otros sitios web o aplicaciones”, explicó Scott Spencer, director de Anuncios Sostenibles de Google en un comunicado.
Enlaces de Consulta:
[+] Políticas de editores: Tipos de contenido donde se prohíben anuncios
[+] Restricciones de editores: Tipos de contenido donde se restringe la publicidad
[+] Actualización de las Políticas de AdSense
[+] Actualización de políticas de monetización sobre el cambio climático
📩 Suscríbete a nuestra newsletter semanal que ya leen 1.200 directivos de los medios